Martes de Wattpad: Incomprendida

¡Hola! Como el blog está un poco vacio he pensado en hacer una nueva sección, voy a ir publicando algunos capítulos de historias que me parecen interesantes que encuentro en Wattpad. En esta ocasión he encontrado esta historia llamada “Incomprendida”:

Una historia que abarca la vida de una adolescente de diecisiete años.

¿Te atreves a acompañar a Samantha en la montaña rusa de su vida?

AVISO: Esta historia está inspirada en "El Club de los Incomprendidos" (Blue Jeans) cualquier parecido con la historia es solo casualidad.

Disfruta la lectura (~^.^)~

Su autora se llama “CarlaMinecraft” y su obra completa la podéis leer aquí:

 http://www.wattpad.com/story/32812542-incomprendida

Comencemos.                               

INCOMPRENDIDA

Prólogo

Mi nombre es Samantha Cawthon y tengo 17 años. Nací en Madrid pero mis padres son norteamericanos (de ahí mi apellido tan característico), lo que ha causado cierto revuelo entre mis compañeros de clase…

Nunca he sido de muchos amigos, no se me da bien socializarme, así que siempre estoy sola.

Tengo unos gustos peculiares, me gustan los videojuegos, la tecnología, el anime… Rara ¿Verdad?

Bueno, haciendo este diario solo pretendo desahogarme y que quien lo lea se meta un poco en mi mente y intente comprenderme.

Siempre fui una incomprendida, pero tengo la extraña sensación de que dejará de ser así…Cuando menos me lo espere.

Capítulo 1. Encuentros

Sábado… Otro sábado más en el que la suave luz mañanera le despierta acariciando con dulzura su cara. Otro sábado en el que la tibia agua de la ducha se desliza por su cuerpo.

Aquella mañana era diferente, no sabía bien por qué pero lo intuía.

-¿Hasta qué hora te quedaste ayer hablando con ese chico?-su madre se había levantado temprano, como todos los días-Óscar se llamaba... ¿No?

Lo que le faltaba, ¡Tener que darle explicaciones a su madre sobre con quién habla…

-¡Buenos días mamá!

La chica sale de la cocina con una manzana en la boca tras saludar a todos los de la casa. Óscar, se la dibujó una sonrisilla tonta cuando escuchó su nombre. ¿Le gusta? ¡Claro que le gusta! Y mucho, pero sabe que él no siente lo mismo por ella… deja salir un pequeño suspiro y cabecea para olvidarse del tema. De pronto su móvil suena… Es su amiga Paula.

-¿Si?

-¿Sam? ¡Llevo una hora esperándote en el Starbucks!

-¿Qu…-Su amiga no le da tiempo a acabar la frase y con un grito le contesta.

-¡¡VEN PARA AQUÍ YA MISMO!!

-Vooy, vooy

Se le había olvidado que el día anterior quedó con Paula. Corre a arreglarse, opta por una camiseta de marinero y unos vaqueros normalitos. También se recoge su largo pelo color miel en dos coletitas. Y como no, sus indispensables auriculares.

Hacía ya un año que no salía de casa sin ellos, ya que en la música encontraba un refugio. Un lugar donde guardar sus secretos, donde expresar lo que siente… Un lugar que desde hace un año es un palacio invisible.

De camino al encuentro con su amiga se choca con alguien.

-Perdón, ¿Estás bien?-Su melodiosa voz aparentemente la de un niño no encaja con su aspecto, más adolescente y desarreglado.

-S…Sí, estoy bien.

-Menos mal…Mi nombre es Álvaro, Álvaro Fernández.

-Encantada, yo soy Samantha, pero todos me llaman Sam.

Los dos jóvenes intercambiaron twitters y con una gran sonrisa mutua, se despidieron.

Qué chico tan raro, su voz era la de un niño pero de edad tendría unos 18/19 años. Qué más da.

La joven llega a su encuentro con Paula, la que le recibe con un abrazo y un beso en la mejilla.